jueves, 11 de diciembre de 2008

Relaciones personales: herramienta al alcance de las empresas

Un nuevo término que he aprendido por estos días es el keiretsu, definido como modelo oriental en el cual existe una coalición de empresas unidas por ciertos intereses económicos, con núcleo central en el que se sitúan una organización matriz, y luego unas organizaciones o unidades de desarrollo de negocios, como lo serian los proveedores; estos últimos con gran independencia, pero que comparten departamentos y acuerdos económicos, y que poseen una alta interdependencia con el núcleo central. En la cual lo interesante de esta estructura es que la cadena de mando no se hace tan extremadamente importante.

Algunos estudios indican que trabajar con este modelo empresarial sabiéndolo implementar, logra que a largo plazo los beneficios de invertir en relaciones superen a los que se conseguirían si solo se concentraran esfuerzos en conseguir menores costos. Y es que se basa en principios que tienen un alto sentido común y que nace desde las relaciones más cotidianas que se desarrollan en cualquier entorno en el que se tome a la relación como base para conseguir un objetivo y metas en conjunto. Una de las seis características del modelo es la comunicación la cual debe ser acertada, no se debe pecar por exceso ni por defecto, así como debe ser oportuna y clara. Esto pasa en nuestro entorno y así como potencia nuestras relaciones interpersonales, de igual forma, se refleja en la sostenibilidad y obtención de beneficios para las empresas que implementan este modelo (Fabricantes y proveedores).

Un mensaje importante, es: "para que confíen en ti también debes confiar", y es por eso que a mi parecer la metodología implementada por las algunas empresas como los son Toyota y Honda, donde el primer paso ha sido aplicar primero el modelo de joint ventures, para luego ir creciendo en conocimientos, autonomía controlada y confianza hacia quienes les están tendiendo la mano, es la forma como se`logran relaciones profundas y duraderas consus proveedores.
Cuando confías en alguien como ser humano estás esperando que esa confianza se vea retribuida con el cumplimiento de algunos valores y acciones que pones como parámetros de medición para saber si debes seguir confiando en quien estas depositando tu confianza. Esto trasladado a la forma como algunas empresas tejen sus lazos y relaciones con los proveedores nos muestra como los beneficios pueden ir en aumento. Ya que en la medida que los proveedores van respondiendo a dichos estándares y controles de medición mas se van tejiendo lazos de trabajo en equipo, por ejemplo, se puede dar lugar a creación de Grupos de estudio integrados por ejecutivos pertenecientes a los dos eslabones de la cadena de valor (fabrica . proveedor) para crear mejores formas de mejorar las operaciones como si se tratase de un solo equipo cohesionado, creando lazos ya que comparten prácticas, información y preocupaciones. Me parece una forma muy interesante e inteligente de hacer negocios y enseñar de igual forma a sus proveedores. La clave es compartir y olvidarnos de ese prejuicio donde solo yo debo ganar.

No obstante lo que más me llamó la atención es que de los seis pasos distintivos que se utilizan en este modelo no funcionan por si solos y de manera descoordinada. Me parece que la filosofía oriental es bastante acertada al identificar de manera clara, ordena y lógica como estos seis pasos deben funcionar como si se tratara de un sistema en si mismo. Pienso que es un modelo que se puede aplicar y ampliar a otros sectores sin importar el tamaño de la empresa, si se tiene el debido cuidado para su aplicación para evitar lo que sucedió a las empresas occidentales cuando sin análisis previo y sin saber porque quisieron aplicarlo y no consgiguieron los beneficios esperados.
Aplicar el sentido común de las relaciones personales a las relaciones empresariales es pues sin duda una forma de lograr competitividad y rentabilidad (sin importar si es compartida).

No hay comentarios.: